¿Cómo se lava la ropa?

 La respuesta es muy sencilla: prendes la lavadora, la llenas de agua, combinas con jabón, echas las prendas, y dejas que la máquina haga el trabajo. ¡Listo! Artículo terminado.

Casi con seguridad, la mayoría de los que estamos leyendo este artículo, lo hacemos así. Pero la verdad es que este es un proceso más complejo. Muchas veces, por falta de tiempo o inclusive por pereza, terminamos recurriendo a ese método; sin embargo, lavar la ropa no es algo que deberíamos hacer en modo automático.

Hay ciertas cosas a considerar y a tener en cuenta; por supuesto, de eso vamos a hablar…

¿A mano o en lavadora?

Antes de que salgas huyendo de este artículo ante la posibilidad de tener que lavar a mano, es importante decirte que hay prendas que, por su material y composición, necesitan este tipo de cuidado. El encaje y los tejidos con bordados, son claros ejemplos. Pero tranquilo, hay prendas que sí pueden ir a ese artefacto ruidoso que da vueltas, y más adelante te contaremos cuáles.

Aunque espera: a veces es necesario recurrir a nuestras poderosas manos si queremos limpiar a profundidad. Porque recuerda que lavar a mano significa lavar cada prenda de manera individual, por lo que te puedes concentrar en cada una de manera particular y especial.

 

¿Todas a la misma canasta?

Es lo habitual, pero no lo más recomendado. Resulta que cada tipo de tela y material tiene su método de lavado predilecto.

Acá te contamos cuál va en dónde:
• Lavadora: algodón, fibras orgánicas, poliéster, acrílico y hasta látex.
• A mano: cachemir, lino y seda.
• En seco: lana y acetato.

“Lavar en seco”, dícese de…

Aquellas prendas que de tocar el agua perderían sus propiedades y hasta se dañarían. Este método de limpieza utiliza solventes como el percloretileno en vez de agua. Así se conservan la ropa de material fino.

El infaltable: ¿blanco o color?

Ahora sí, lo que estábamos esperando. La pregunta fue a propósito y nos equivocamos adrede. Pues resulta que la separación no es en dos grupos, es en tres: blanco, colores pasteles y colores oscuros.

Beneficios de hacer esto, dos:

1. No teñir tu ropa blanca de cualquier otro color que haya caído en la lavadora.

2. Poder blanquear tu ropa blanca sin inconvenientes y sin temor a estropear tus otras prendas.

Y anota este otro dato sobre la temperatura del agua: de 0° a 20° para ropa de color oscuro; de 30° a 40° para la de colores pastel; y de 40° a 60° para las prendas blancas.

 

Listo, ya sé cómo lavar la ropa. ¿Pero en dónde consigo los productos?

En Medellín, Colombia, hay una tienda especializada en el aseo y limpieza del hogar. Su nombre: KipClin. Tienen tres puntos de venta físicos, pero pueden llegar a cualquier barrio de la ciudad y municipios aledaños gracias a su servicio a domicilio.

Si quieres conocer su catálogo de productos, te invito a ingresar a este link: https://www.kipclin.com/lavanderia/ver-todo-lavanderia.html

Tienen una categoría especial en lavandería: detergentes, blanqueadores, suavizantes y quitamanchas. Hasta cepillos, por si te animas a lavar a mano y necesitas una ayudita extra.